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| Virtudes Gonzalez Garcia mi tía |
El 5 de Agosto de 2018 se cumplen 77 años de este asesinato de estado.
VERDAD, JUSTICIA Y REPARACIÓN
Aquella noche calurosa despertaron sobresaltadas por el sonido de los cerrojos y los pasos de las funcionarias. era un "ritual" que ya habían visto llevar a cabo con otras compañeras antes de su último viaje.
Las Trece Rosas, trece mujeres idealistas, la mitad de ellas menores de edad, recorrieron juntas los últimos metros de su vida.
Primero, hacia la capilla de la prisión, donde escribieron cartas ( si se confesaban) de despedida para las familias.
Después una a una, atravesaron la puerta de la cárcel para subir al viejo camión que las llevaría hacia un destino final.
Eran las cuatro y media de la mañana y en apenas 15 minutos recorrieron los 500 metros que las separaban del Cementerio del Este. Allí se bajaron del camión y comprobaron sobre el muro del camposanto lo que hasta ese momento se habían negado a comprender.
Puestas en linea sobre la pared, lo último que pudieron oír fue el estruendo de una descarga de balas sobre sus cuerpos cuando apenas comenzaba a despuntar el día.
El resto tan sólo lo pudieron escuchar sus compañeras de encierro, que desde Ventas, contaron los tiros de gracia con los que remataron a las jóvenes, Uno, dos tres...hasta TRECE.
Ellas fueron a juicio el día 3 de Agosto; cuando vinieron por la noche, era muy tarde, vinieron con pena de muerte, y entonces se vio rápidamente que aquel asunto era muy serio y además, muy rápido por la forma en que se las había juzgado, sumario de urgencia...
Teóricamente aún se estaba a tiempo de tramitar el indulto. la sentencia de la causa judicial con fecha 3 de Agosto, fue aprobada ese mismo día por la Auditoria de Guerra, pero en el texto se hacia constar que la ejecución de las penas de muerte permanecería en suspenso hasta que se recibiera el enterado del general Franco como Jefe de estado. sin embargo, si por un lado la directora de la cárcel de Ventas, Carmen de Castro, no llegó a cursar las instancias de indulto entregadas al capellán, que se quedaron en su mesa de despacho, por otro la sentencia se ejecuto el día 5 sin esperar a recibir el enterado del Generalísimo, que seria firmado el día 13.
Fácil resulta imaginar el sufrimiento y la desazón de los familiares, sobre todo teniendo en cuenta que no fueron informados de nada.
Aparte de las Trece Rosas ese nefasto 5 de Agosto fueron fusilados 33 personas mas en las tapias del Cementerio del Este.
En el marco de la JSU clandestina: Virtudes Gonzalez Garcia desempeño durante un tiempo el cargo de Secretaria de Organización del Comite Provincial de la JSU. En algunos casos sus parejas militaban también en la misma organización, como el compañero de Virtudes Gonzalez Garcia, Valentin Ollero Paredes, encausado y fusilado en el mismo proceso.
Los testimonios de sus compañeras de Ventas refieren que Virtudes y Valentin mantuvieron contacto por escrito mientras estuvieron encarcelados- sobre todo a través del intercambio de mensajes en el Palacio de las Salesas, donde se celebraban los Consejos de Guerra- y que ella confiaba en poder verlo antes del fusilamiento. No pudo ser, ya que por norma los hombres eran ejecutados siempre en primer lugar.
Maria del Carmen Cuesta, también afiliada a la JSU y amiga de Virtudes Gonzalez, hace una descripción de las arriesgadas tareas que desempeñaban estas mujeres como enlaces de la organización.
"Fui a ver a Virtudes porque era la más próxima a mi vivienda y comentándole lo que ocurría decidimos ponernos en contacto con los demás compañeros, con aquella que fuera posible, y no en casa sino por la calle, con el fin de conseguir algunos céntimos, un poco de tabaco y comida para llevarlo a las cárceles para aquellas personas que ya sabíamos que no tenian nada para sobrevivir.
Pero la historia las volvió a matar después de su fusilamiento, como a tantas otras mujeres, porque después de aquel 5 de Agosto de 1939 nadie volvió a hablar de ellas.
Solo pervivieron, con la fuerza del dolor y la ira que inspira la injusticia, en los corazones de un grupo de mujeres que, compartieron con ellas cárceles y penas.
Gracias a su insistencia, a su labor callada y a su rebeldia ante el olvido traidor del tiempo Las trece Rosas figuran recordadas en una placa, y cada año nos debe hacer pensar en cuántas mujeres, que no tuvieron siquiera la suerte de contar con tan fieles y combatientes compañeros, yacen hoy en la ignominiosa ignorancia de sus nombres.
Nadie habla de ellas. Eran sin embargo valientes, arrojadas, decididas hasta el punto de exponer sus vidas por defender sus sueños.
Rescatemos, si no los nombres que ya están para siempre perdidos, la memoria de aquellas mujeres que lucharon, que soñaron, que lloraron...que murieron.
Que lo sacrificaron todo por el sueño de que el mundo fuera más habitable y menos inhóspito para las generaciones futuras de lo que fue para ellas.
Ya que hemos olvidado sus nombres, no olvidemos - al menos- su ejemplo.
IN MEMORIAM
VERDAD, JUSTICIA Y REPARACIÓN
Aquella noche calurosa despertaron sobresaltadas por el sonido de los cerrojos y los pasos de las funcionarias. era un "ritual" que ya habían visto llevar a cabo con otras compañeras antes de su último viaje.
Las Trece Rosas, trece mujeres idealistas, la mitad de ellas menores de edad, recorrieron juntas los últimos metros de su vida.
Primero, hacia la capilla de la prisión, donde escribieron cartas ( si se confesaban) de despedida para las familias.
Después una a una, atravesaron la puerta de la cárcel para subir al viejo camión que las llevaría hacia un destino final.
Eran las cuatro y media de la mañana y en apenas 15 minutos recorrieron los 500 metros que las separaban del Cementerio del Este. Allí se bajaron del camión y comprobaron sobre el muro del camposanto lo que hasta ese momento se habían negado a comprender.
Puestas en linea sobre la pared, lo último que pudieron oír fue el estruendo de una descarga de balas sobre sus cuerpos cuando apenas comenzaba a despuntar el día.
El resto tan sólo lo pudieron escuchar sus compañeras de encierro, que desde Ventas, contaron los tiros de gracia con los que remataron a las jóvenes, Uno, dos tres...hasta TRECE.
Ellas fueron a juicio el día 3 de Agosto; cuando vinieron por la noche, era muy tarde, vinieron con pena de muerte, y entonces se vio rápidamente que aquel asunto era muy serio y además, muy rápido por la forma en que se las había juzgado, sumario de urgencia...
Teóricamente aún se estaba a tiempo de tramitar el indulto. la sentencia de la causa judicial con fecha 3 de Agosto, fue aprobada ese mismo día por la Auditoria de Guerra, pero en el texto se hacia constar que la ejecución de las penas de muerte permanecería en suspenso hasta que se recibiera el enterado del general Franco como Jefe de estado. sin embargo, si por un lado la directora de la cárcel de Ventas, Carmen de Castro, no llegó a cursar las instancias de indulto entregadas al capellán, que se quedaron en su mesa de despacho, por otro la sentencia se ejecuto el día 5 sin esperar a recibir el enterado del Generalísimo, que seria firmado el día 13.
Fácil resulta imaginar el sufrimiento y la desazón de los familiares, sobre todo teniendo en cuenta que no fueron informados de nada.
Aparte de las Trece Rosas ese nefasto 5 de Agosto fueron fusilados 33 personas mas en las tapias del Cementerio del Este.
En el marco de la JSU clandestina: Virtudes Gonzalez Garcia desempeño durante un tiempo el cargo de Secretaria de Organización del Comite Provincial de la JSU. En algunos casos sus parejas militaban también en la misma organización, como el compañero de Virtudes Gonzalez Garcia, Valentin Ollero Paredes, encausado y fusilado en el mismo proceso.
Los testimonios de sus compañeras de Ventas refieren que Virtudes y Valentin mantuvieron contacto por escrito mientras estuvieron encarcelados- sobre todo a través del intercambio de mensajes en el Palacio de las Salesas, donde se celebraban los Consejos de Guerra- y que ella confiaba en poder verlo antes del fusilamiento. No pudo ser, ya que por norma los hombres eran ejecutados siempre en primer lugar.
Maria del Carmen Cuesta, también afiliada a la JSU y amiga de Virtudes Gonzalez, hace una descripción de las arriesgadas tareas que desempeñaban estas mujeres como enlaces de la organización.
"Fui a ver a Virtudes porque era la más próxima a mi vivienda y comentándole lo que ocurría decidimos ponernos en contacto con los demás compañeros, con aquella que fuera posible, y no en casa sino por la calle, con el fin de conseguir algunos céntimos, un poco de tabaco y comida para llevarlo a las cárceles para aquellas personas que ya sabíamos que no tenian nada para sobrevivir.
Pero la historia las volvió a matar después de su fusilamiento, como a tantas otras mujeres, porque después de aquel 5 de Agosto de 1939 nadie volvió a hablar de ellas.
Solo pervivieron, con la fuerza del dolor y la ira que inspira la injusticia, en los corazones de un grupo de mujeres que, compartieron con ellas cárceles y penas.
Gracias a su insistencia, a su labor callada y a su rebeldia ante el olvido traidor del tiempo Las trece Rosas figuran recordadas en una placa, y cada año nos debe hacer pensar en cuántas mujeres, que no tuvieron siquiera la suerte de contar con tan fieles y combatientes compañeros, yacen hoy en la ignominiosa ignorancia de sus nombres.
Nadie habla de ellas. Eran sin embargo valientes, arrojadas, decididas hasta el punto de exponer sus vidas por defender sus sueños.
Rescatemos, si no los nombres que ya están para siempre perdidos, la memoria de aquellas mujeres que lucharon, que soñaron, que lloraron...que murieron.
Que lo sacrificaron todo por el sueño de que el mundo fuera más habitable y menos inhóspito para las generaciones futuras de lo que fue para ellas.
Ya que hemos olvidado sus nombres, no olvidemos - al menos- su ejemplo.
IN MEMORIAM
